cantando en silencio...

Pensar, pensar, pensar....

A veces desearía no pensar....

Veamos que sale....

El alba y el ocaso son hermosos...

Si demasiado...

Pero no me siento conmocionado....

Solo inhalo y exhalo un humo espeso....

Como decirle que por ella los lobos aúllan...

Como explicarle al sol que la luz no es mí ayuda...

Converjo en colores...

Tapizo el cielo con mis emociones....

No quiero cantar ya...

Ni siquiera deseo respirar más...

¿Como danzarle ala luna nueva?

¿Como tocar una nota muda?

Entre hojas secas una golondrina se pudre...

Y su canto se lo lleva el viento...

Todo perece en un dulce intento....

Como quisiera reclamarle mi nacimiento a mi madre...

Una mujer me saluda...

Vestida de negro y con capucha...

Me dice que siga la luz al final de esta miseria....

Que allá encontrare la salida de mis tristezas....

¿La deberé escuchar?

¿Deberé seguirla en ves de luchar?

Cuando un hombre pierde los deseos de hablar…

De escribir poesía...

De recibir algún acto de cortesía...

De al espacio caminar...

Las campanas de la misa te llaman...

No las agás esperar...

Yo estaré donde mismo...

Pues mi corazón ya no quiere palpitar...

Te dejo mis memorias..

Envueltas en papel y una soga...

Al igual que esa rara sombra..

Que se escapo como anima que se ahoga...

Por que tengo que pensar...

Por que tengo que escuchar...

Esto de leer y hablar me va a desangrar...

Solo quiero por siempre cantar...

Entre coros de ángeles o demonios danzantes...

Francamente me da igual...

Que en la tierra e vivido mil tormentos...

Al lado de la belleza ambigua de tus besos...

Oh! amada mía corre ala misa...

Las campanas resuenan al vals de mi canto...

Llévate esas rosas rojas que tomaste de sus manos...

Por las cuales yo ya no estoy entre los humano.....

Subiré esta escalera de la que tanto e hablado...

No quise decírtelo pues prefiero callarlo....

Preferí perder la vida a provocarte el llanto...

Tome la soga de mis miedos y probé la sonrisa de tus besos...

Aunque no míos, aun así deliciosos...

Aunque para otro, pero aun así los mas perfectos...

Ahora te espero cantando...

En zion o en el hades da lo mismo....

Pero aquí estaré recitando...

Que dicha sentía mientras tomaba tu mano....

Corre amada mía, corre ala misa...

No los agás esperar...

Que velan una muerta sonrisa...

Del que ya no quiso respirar...

Del que solo quiso cantar...

Y esperar...

Esperar.....