«El auténtico escritor no se dedica a modular cosas bonitas para los lectores, sino únicamente debe aclararse a sí mismo e interpretar mediante la magia de la palabra su propio ser y sus vivencias, resulte bonito o feo, bueno o malo».


Hermann Hesse

lunes, 16 de enero de 2012

¿Por qué no puedes ser mía?

¿Por qué no puedes ser mía?
En las noches como esta, ¿por qué no puedes serlo?
Ser la caricia que se esconde entre las sombras nocturnas…
La briza que humedece mis labios, y se cuela por mi pecho…

Esos ojos que explotan cada vez que me miran…
Con esa luz, y sus sombras mágicas que hipnotizan….
Ah! Esos labios que me dicen que sientes, me lo susurran con ternura…
Tu tersa seda blanca, ¿Por qué no puede ser mía?

Esa sonrisa al teléfono, tan exquisita y transparente…
¿Por qué no puede ser mía tu alegría?
¿Qué debo de hacer para acariciar las flores de tu cabello?

No puedo resignarme, la música de tu latir se me a echo necesaria, mucho más que el respirar…
¿Robarte un roce entre sonrisas y universos?
¿Qué puedo hacer? ¿Despedirme del suspiro matutino acompañado de melancolía y algún cigarrillo?
¿Por qué no puedes ser mía?

Un rose, solo eso….
Una caricia impregnada de ocasos y amaneceres…
¿Un beso? Si con una caricia me perdería entre supernovas de colores…
¿Por qué no puedes ser mía?
Solo su sonrisa, su voz y sus manías…
Cuántas vidas abre añorado a un sentimiento como el tuyo….

Frágil ángel con alas escarlatas…
Perderme en tus infiernos, en cada uno de tus pasajes…
Darte mi aliento, mi sudor y mis besos…
Escribirte en cada estrella un poema, y tocarte una canción con las lluvias nocturnas….
Solo para vivir por ti, que esos mágicos ojos verdes miren la luna en mis pupilas…

¿Como hago mío el cielo y el firmamento?
Solo un vago y distraído instante…
¿Como hacerlo mio?

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