¿Y si nadie me extraña?
Si después de tanto sangrar por un sueño infinito que muere
con cada atardecer y renace al alborada de tu compañía…
Si cuando te tengo entre mis brazos sé que es como si
abrasaras al viento frio de enero…
Si todo este sacrificio es para un retrato que no sonreirá jamás
por este da vinci que lucha por tener su mona lisa…
Por favor perdóname cariño, pero mi alma sangra y no quiere
volver ya a casa…
Después de tantas noches de dormir acariciando las tercas
manos de un sueño,
Después de soñar con tus labios desgarrando mi pena,
Después de abrasarte en el infinito universo del anhelo
despierto solo, solo en mi penumbra…
¿Tan poco valgo?
Que ni muriendo por este sueño, que ni viviendo por ver tu
feliz caminar hasta la meta más dulce de tu vida, ¿ni aun así valgo algo para
ti?
Ni aunque olvide mi mundo y sea el peón que mata las torres
de tus problemas, que retumban los tambores de guerra en mi pecho cada que una
lagrima sale de tus ojos…
¿Aun así solo soy una mancha más en la capilla Sixtina de tu
existir?
¿Y si no te acuerdas de mi?
El día que el tiempo me lleve a ser uno con el universo y
viajar en el trémulo de un solsticio espectral…
El día que mi aliento ya no busque tu cuello, el día que
todo lo que he luchado se vaya a un
hueco en un olvidado cementerio…
Si ese triste día tú no sabes quién es el hombre que yace
bajo ese rosal marchitado…
Perdóname amor, pero no puedo seguir luchando con esto,
He dado tanto por ti, y ahora estoy solo…
Luchando contra ese murmullo que en algún lenguaje extraño
solo dice palabras sin sentido, sin sentimiento…
El murmullo que exhalas cuando de vez en cuando me dices te amo…
¿Tan poco valgo?
Tanto como para que esa mágica palabra se sienta tan vacía,
tan ambigua…
Dime ángel mío, ¿te acordaras de mi cuando me despida de
esta batalla por tu cariño?
Tal vez si, tal vez algún día a el compañero mas cercano le
pregunte, ¿no hace falta algo?
Estoy segura que antes había algo aquí, ¿Qué puede ser esa
diminuta sensación de ausencia?
Y después veras cualquier cosa y olvidaras mi existir, mi allegado
existir…
Por favor perdóname amor…
Pero no puedo seguir a tu lado,
No mientras sienta el frio de tu ausencia,
No mientras tu cuerpo sea de hielo,
Y tus palabras sean más ligueras que la escarcha…
¿Tan poco valgo?
Tanto como para dudar que algún día me extrañes…
Que notes la ausencia del hombre que dio todo por lograr la
felicidad que tanto añoras…
Por favor amada mía, perdóname pero no volveré a casa otra vez…
No hay comentarios:
Publicar un comentario